Se colocan todas las fichas del dominó boca abajo sobre la mesa. Cada jugador escoge ocho fichas y las pone boca arriba. Se apilan a un lado las demás fichas.
El primer jugador elige una ficha y la pone boca arriba en el centro de la mesa.
El segundo jugador trata de añadir a uno de los dos lados de la ficha central otra ficha que corresponda con un dibujo de la primera ficha.
Si no logra encontrar una ficha que corresponda, deberá ir robando una ficha tras otra de la pila hasta que encuentre una correspondencia.
El jugador que primero coloque todas sus fichas en la mesa será el ganador y podrá reclamar su recompensa, que consistirá en elegir una de las posturas sexuales de las fichas del dominó.
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